Dibujo: Juan Carlos Amaro
Yo cosía a los trece
mangas de camisa
para caballeros de cuarenta,
y a veces también
los cuellos y puños.
La paga de los viernes
la dejaba en el mueble bar de la entrada.
Mi madre me obligaba a gastar
la mitad en vino de garrafa para sus noches solitarias.
La otra mitad, se lo tragaban las bocas de mis cinco hermanos varones.
Me casé a los...